En el lugar en el que anteanoche asesinaron a Monkey Black, admiradores y amigos del rapero dominicano colocaron velas y flores, además de reunirse y cantar su tema más popular, “El sol, la playa y un tro de vaina”.
También montaron una vigilia pidiendo justicia por la muerte de su compatriota.
En Santo Domingo, el padre de Monkey, José Altagracia Fabián, pidió justicia y ayuda a las autoridades para repatriar el cuerpo de su hijo
porque no cuenta con los recursos económicos para los trámites.
Desde hace seis meses Fabián y su hijo no se comunicaban ni por teléfono. “Nos sentimos indignados. nos cogió de sorpresa”, expresó el
papá del rapero.
En cambio, el ministro de Cultura, José Antonio Rodríguez, expresó su pesar: “Lamentamos la muerte de ese joven, como la de cualquier otro dominicano o persona que muera en circunstancias similares”.
Según fuentes, la víctima, a quien los servicios médicos no pudieron salvar la vida pese a su “rápida” intervención, fue agredida por dos personas tras una discusión que se inició en un bar cercano.
Las mismas fuentes señalaron que los presuntos homicidas se dejaron olvidados en el bar algunos objetos personales, que no precisaron.
El área de investigación criminal de la región policial metropolitana de Barcelona se ha hecho cargo del caso y busca ahora a los dos agresores, que huyeron tras la pelea. Testigos del homicidio aseguraron que el joven dominicano falleció después de caminar unos
veinte metros tras ser apuñalado a la salida del bar.
De acuerdo con la policía de Barcelona, el rapero, cuyo nombre verdadero es Leonardo Michael Flores Ozuna, de 27 años, murió a consecuencia de varias heridas de arma blanca.
Los colegas del rapero están tristes. Shelow Shaq, Vakeró, Químico, La Materialista, Arcángel, Omega, El Lápiz y otros exponentes expresaron su dolor.
