Debido a la demanda legal que interpuso Aracely Arámbula en contra de Luis Miguel en Estados Unidos, el cantante ya se prepara para no quedar en bancarrota por los alegatos que determinó la actriz ante las autoridades americanas.
Tan es así, que el afamado Sol de México ha decidido agregar tres conciertos más a final de año en nuestro país, dos en el Auditorio Nacional, el 5 y 6 de diciembre, y uno más en Monterrey, Nuevo León, pese a que ya había concluido sus presentaciones en tierra azteca.
De acuerdo a una fuente cercana al intérprete de Culpable o no y La incondicional, el ojiverde planea presentar una demanda millonaria en contra de su ahora expareja, en la cual protesta el abandono y distanciamiento con sus hijos (Miguel y Daniel), pensión alimenticia retroactiva, daño moral y psicológico de los menores, así como los gastos correspondientes a colegiaturas y gastos médicos de los infantes.
Debido a esto, Luismi ha decidido jugar su último As bajo la manga y adelantarse a la inversión que hará en el proceso, pues de perder, tendría que pagarle los gastos de honorarios del litigio a La Chule.
MÁS TIEMPO CON SUS HIJOS
Pese a las innumerables especulaciones respecto a que Gallego Basteri no frecuenta a los pequeños que procreó durante su relación con la chihuahuense, fue ella misma quien dio fin a dichos rumores durante la entrevista que le concedió al periodista Carlos Alazraki, el pasado mes de septiembre, cuando por primera vez reconoció abiertamente que trata de acercar a Dani y Miguelito con la estrella musical, y aunque sostuvo que los tiempos nunca son suficientes, también aseveró que cada vez que los niños conviven con él, disfrutan al máximo el tiempo a su lado.
En mayo del 2011 la opinión pública se volcó en contra de Luis Miguel luego de que una revista de espectáculos publicara que Aracely había llevado a sus hijos a la pista de un aeropuerto aproximadamente a las tres de la mañana, para que los niños pudieran convivir por lapso de media hora con su padre.
Tanto gente del público como algunos medios calificaron en aquel tiempo de irresponsable al cantante, por reunirse con los pequeños en ese horario.
