Ricky Martin podrá cantar en Tegucigalpa el próximo 16 de octubre como tenía previsto, pese a las quejas de un grupo de evangélicos que lo repudiaron por considerarlo un mal ejemplo para la niñez, pero sólo los mayores de 15 años podrán asistir al concierto.
"La política del Estado es garantizar las libertades públicas. Por eso, Martin puede ingresar a Honduras cuando él lo considere pertinente", dijo el jueves al canal 5 de la televisión local la ministra de Derechos Humanos, Ana Pineda.
Pineda informó que el presidente Porfirio Lobo Sosa se comunicó desde Washington, donde realiza una visita oficial de cuatro días, y le notificó la decisión a fin de que realizara los trámites oficiales respectivos.
Pero al espectáculo ingresarán sólo mayores de 15 años "por el contenido de dosis bisexual y las escenas eróticas y sexuales que se presentan en el concierto Música, Alma y Sexo", dijo el jefe de la Comisión de Censura de la Secretaría del Interior, Alberto Espinoza, tras la determinación de Lobo.
La restricción para el acceso de menores fue determinada por el gobierno luego de analizar vídeos de presentaciones anteriores de Martin.
Espinoza dijo en rueda de prensa que en la agenda del organismo "jamás se analizó prohibir el ingreso al país de Martin" y agregó que los promotores promovieron al artista sin contar con el permiso oficial, por lo que se tuvo que intervenir.
Los evangélicos hondureños expresaron el miércoles su repudio por el concierto del cantante y activista, quien recientemente dio a conocer que es homosexual.
"No nos oponemos por las preferencias sexuales del artista porque eso es parte de su vida privada, pero sí al mensaje que trae porque no es un ejemplo para la familia", dijo el presidente de la Confraternidad Evangélica, Alberto Solórzano, en una carta enviada al gobierno.
Para Solórzano, Martin posee "un mensaje contradictorio porque con una mano promociona la ayuda humanitaria a una fundación que trabaja para la niñez y con la otra modela conductas que promueven antivalores y que atentan contra la familia y esa misma niñez que pregona apoyar".
La presentación de Martin en Honduras será a favor de la organización Amor, que apoya a niños pobres.
Solórzano envió la misiva al ministro del Interior, Africo Madrid, quien dijo que se nombró una comisión estatal para analizar la situación, cuya intervención no fue necesaria tras el pronunciamiento de Lobo.
La Confraternidad Evangélica agrupa a más del 4% de los 8 millones de habitantes de Honduras con iglesias diseminadas en todo el territorio nacional.
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