La mítica reina de la música latina se despojaba de su ropa en el escenario y le cantaba con pasión a la angustia que se queda cuando se va el amor.
La Lupe, pertenece a las leyendas de una época que han trascendido tiempo y espacio. La mítica cantante de la música latina conquistó los escenarios en la década del 60.
Daba igual si cantaba en inglés o en español, la estrella cubana dejaba perplejos a quienes pagaban por verla. La potente voz de la intérprete, sumada a sus ocurrencias, convertía los escenarios en obras de teatro dignas de cualquier premio.
La Yiyiyi, como la apodaban, se quitaba los zapatos, se halaba el pelo y hasta gemía entre medio de sus interpretaciones. Su drama en tarima era extravagante y totalmente fuera de la norma de la época, pero ese fue el estilo que la llevó a la cúspide del éxito.
Entre sus éxitos se encuentran canciones como,‘’Que te pedí’’, ‘’Carcajada final’’, ‘’La tirana’’ y ‘’Puro teatro’’, estas últimas tres de la autoría del compositor puertorriqueño, Tite Curet Alonso.
Igualmente, a principios de la década de los 60, trabajó como cantante de Tito Puente, ‘’El Rey del Timbal’’, quien la proclamó como ‘’La Reina del Soul’’.
Pocos le han cantado al desamor como la hija de Santiago de Cuba. Le enseñó a toda una generación que el mal de amores se cura con boleros y el bueno se celebra con guaguancó.
A finales de los años 60 la cantante cubana fue galardonada por la prensa latina de Estados Unidos como la cantante más destacada.
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