Los éxitos en la música le han dado la oportunidad al exponente urbano J Álvarez de volar alto. Pero él prefiere quedarse con los pies en la tierra.
Evocar constantemente sus raíces se ha convertido por años en una práctica habitual para el artista de padres dominicanos, cuya crianza transcurrió en varios vecindarios de Río Piedras. Por eso, desde que decidió establecerse en Orlando, Florida, regresar a los barrios que acogieron sus pasos es una rutina obligada en cada oportunidad que viaja a Puerto Rico.
Es como devolver esa enseñanza en el sentido de que por lo menos a mí me costó llegar. Tuve que aprender solo. Lo hago como un tipo de honor a mi gente, que siempre me dicen ‘J, ya estás famoso’, pero muchos saben que me caracteriza la humildad y soy una persona de pueblo. Triunfar se me ha hecho bien difícil y les quiero dejar saber que si yo lo hice, ellos lo pueden hacer. Que no tengan ese miedo”, comentó el artista en un encuentro con este medio en el local Delavida RestoBar, en San Juan.
“He tenido que aprender a fuerza de cantazo y estoy aquí, estoy vivo y puedo ser una persona que puedo ayudar a muchos jóvenes que a lo mejor se sienten encerrados y dicen ‘diantre, no puedo hacer na’. Hay muchos muchachos que tienen talento, pero tienen la mente débil en el sentido de que tienen muchas inseguridades y yo los he visto, muchachos con talento, pero demasiado inseguros”, insistió el vocalista, quien actualmente promueve el tema De la mía personal.
Sobre la melodía, que se encuentra en las principales plataformas digitales, detalla que se inspiró en una frase de pueblo de República Dominicana. “Es una expresión que se usa en la calle, como decir ‘de los míos’”.
La lírica abarca un matiz “entre lo sensual y lo romántico, pero no me voy vulgar”. Al reflexionar sobre el tema, menciona que “esa conexión entre lo underground y lo comercial y no hablar malo para pegar en la calle es algo que es un logro para un artista de reguetón”.
Al hablar de lo que lo inspira en sus letras, comparte que “siempre velo mucho la manera en que se proyectan las mujeres, de cómo hablan, lo que les hace falta, lo que los amigos me dicen que desearían decirle a una muchacha y no se lo dicen. Trato de ser ese portavoz en el sentido de que hay muchachos que me dicen ‘oye J, me casé con fulana y fue con este tema tuyo que se lo dediqué”.
El vídeo, grabado en República Dominicana, ya sobrepasa las 69 millones de visitas en YouTube. Además de este logro, celebra que la canción, que se incluye en su álbum La fama que camina, se coló ayer “en los primeros 50 de Latin Airplay (Songs Chart) de Billboard”.
En el plano personal, el padre de los gemelos de 5 años Kasniel y Alexander, producto de su relación con su esposa Maribel, comparte que “con la ayuda de una buena pareja creo que todo es mi posible. Mis hijos me han enseñado muchas cosas en el proceso de esta vida artística. Disfruto mucho con sus ocurrencias”.
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