Yuri conquistó todos los premios que entrega el Festival de la Canción de Viña del Mar e hizo bailar a miles de personas que desafiaron el frío y la esperaron hasta las dos de la madrugada del martes, cuando inició su camaleónico espectáculo.
La espera valió la pena. La cantante mexicana salió vestida como romana y cantó "Baile caliente". Luego de un rápido cambio de vestuario, vinieron "Amiga mía" y "Todo mi corazón", acompañadas por un coro de más de 10,000 personas que seguían en el anfiteatro al aire libre donde se desarrolla el certamen.
Yuri no pisaba el escenario de Viña del Mar desde 1995. Su debut en el certamen fue en 1984, y, según ha reconocido, le sirvió para su proyección internacional.
Cerca de las tres de la madrugada y tras varios cambios de vestuario, Yuri bajó el ritmo y apeló al romanticismo, con "Arrepentida" y "Esperanzas", para luego seguir bailando con miles de fanáticos que la acompañaron hasta cerca de las 4:00 a.m.
El público del festival conocido como el "monstruo", porque endiosa a sus favoritos y espanta a pifias y gritos a quienes le desagradan, premió a Yuri con las Antorchas de Plata y Oro y, al final, la mexicana también se llevó la Gaviota de Plata, estatuilla reservada para los ganadores de la competencia internacional.
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